12.03.2018 | Los propietarios de los inmuebles cumplen en solo 10 días con la ejecución de la orden de demolición.
El pasado 8 de marzo, los 4 chalets adosados construidos junto al Millars, en Villa-real, quedaron reducidos completamente a escombros. Los propietarios han tardado tan solo 10 días en cumplir con la orden de demolición.
Los hechos se remontan 15 años atrás, con la denuncia de un vecino ante el Ayuntamiento de Villa-real. Tras la pertinente inspección de los técnicos municipales, el Ayuntamiento paraliza las obras. Sin embargo, los propietarios completaron las obras, haciendo caso omiso de la orden de paralización.
Tras la desobediencia de los propietarios ante la orden de paralización del Consistorio, este pone los hechos en conocimiento de la Fiscalía. En el año 2006, el Juzgado Penal número 2 de Castellón dicta orden de demolición para las 4 viviendas y condena a los propietarios y constructor a 7 meses de prisión y a una multa de 3.500 euros para cada uno. En 2007, la Audiencia Provincial ratificó la sentencia citada anteriormente.
Posteriormente, la justicia requirió al Ayuntamiento de Villa-real para que ejecutase la orden de demolición que pesaba sobre las viviendas, y es por eso, que los propietarios no han tenido mas remedio que demoler las viviendas antes de que el Consistorio lo hiciera subsidiariamente.
Fuente: “El periódico mediterráneo”.
Redactor: Equipo de prensa de Vélez Dorado.
Publicaciones y noticias relacionadas: